Como los luchadores natos, Dereck Hatfield parece no conocer el desánimo. En su página web podemos leer esta breve semblanza del marino: “Se necesita un coraje tremendo, determinación y persistencia para correr regatas alrededor del mundo en solitario. Derek es el número 126 entre los valientes navegantes que han logrado conseguirlo. Contemplando esta cifra en perspectiva, es menor que la de los 400 astronautas que han viajado al espacio o los más de 15.000 montañeros que han alcanzado la cumbre del monte Everest. Resulta un logro tremendo haberlo conseguido en circunstancias normales, no obstante su historia es verdaderamente inspiradora”. En la actualidad Hatfield ha amarrado su velero ‘Spirit of Canada’ en los muelles de Yacht Port Cartagena. Y amablemente ha accedido a concedernos esta entrevista.
-Viendo su palmarés, y salvo accidente de última hora, usted parece tener negociada y firmada una conexión directa con el podio. Como si estar ahí arriba después de una regata oceánica de varias semanas o meses fuera cosa fácil y al alcance de todo el mundo…
A pesar de que pueda parecer fácil para los navegantes solitarios el navegar alrededor del mundo, uno no se puede despertar un día y pensar en realizar un esfuerzo semejante. Se necesita mucho compromiso y perseverancia para prepararse para una regata así, y una gran cantidad de apoyo de amigos, ya que sin ellos esto no sería posible. En estas regatas todo se centra en la atención al detalle y en la preparación de la embarcación y la persona.
Me siento muy feliz por poder hacer regatas alrededor del mundo y hacerlo tan bien. Pienso que el haber crecido en zonas rurales de Canadá me ha dado el carácter y la fortaleza necesarios para afrontar estos eventos.
Pero no creas que todo es diversión y una navegación tranquila. Como en cualquier carrera o competición, el sentido del logro y el disfrute viene después de terminar la regata. Durante la regata en sí, hay un montón de dificultades y un trabajo muy duro. Hay momentos de cansancio y depresión en los que un patrón, literalmente, puede llorar hasta quedarse dormido, de lo infelices que se sienten allí solos.
-¿Es consciente de que ha convertido en su forma de vida el sueño de una buena parte de aficionados a la navegación? En este momento de su carrera y con toda la experiencia acumulada a sus espaldas, ¿se siente un privilegiado?
No estoy seguro de sentirme un privilegiado, porque ha habido un montón de trabajo duro y de sacrificio para llegar a esta etapa de mi carrera en la vela profesional. Creo que con determinación y con un trabajo duro, muchos navegantes pueden realizar esos largos viajes.
-¿Prefiere navegar en solitario o con una tripulación a bordo?
He navegado con tripulación y solo. Creo que la única manera de mejorar en un velero de regatas es navegando con personas que son mejores que yo. Ahora, prefiero correr regatas en solitario ya que, cuando termino una regata, me produce una gran sensación de logro. Para divertirme cuando no estoy regateando me gusta ir de crucero con familiares y amigos.
-De vez en cuando, ¿no me negará que se pasa miedo ahí en medio, verdad…?
No creo que exista ningún “miedo” per se. Sólo, a veces, la preocupación por la seguridad. Pienso que si los patrones tuvieran algún temor, no serían capaces de alejarse del muelle para hacer solos este tipo de regatas en alta mar. Para estas regatas, los patrones tienen que prepararlo todo, y cada detalle debe ser tenido en cuenta ya que el más pequeño de los problemas puede conducir a un problema mucho más grande, y arruinar el resultado.
-En su página web www.spiritofcanada.net, vemos que, en conexión con la Royal Yachting Association (RYA), y a bordo del nuevo y flamante velero Volvo 60 Amer Sports One, que acaban de comprar, todas aquellas personas interesadas en experimentar lo que es la navegación de altura a bordo de uno de estos monstruos de última generación tienen la posibilidad de hacerlo. Es una opción que le habrá quitado ya el sueño a más de uno. ¿Qué puede contarnos de este nuevo proyecto?
Quiero ser capaz de compartir mis experiencias de navegación con todo el mundo, y darles la oportunidad de navegar en alta mar de una manera muy diferente y radical. Pienso ahora que es mi deber ofrecer esta experiencia a otros marineros, que me han apoyado durante 15 años en mi sueño de competir en tres vueltas al mundo.
-Por último, y ahora que su ‘Spirit of Canada’ está fondeado en los muelles de Yacht Port Cartagena, déjeme que le formule una pregunta de cierto calado –y no me responda que no-: ¿a que le gusta nuestro puerto?
Me siento muy honrado de estar en Yacht Port Cartagena. Debo decir que el destino fue quien me trajo aquí, ya que no tenía previsto detenerme en Cartagena. Tuve un problema con la vela mayor. Pero ahora que estoy aquí, me gusta tanto que he decidido quedarme mucho más tiempo y establecer mi base en Yacht Port Cartagena. El equipo del puerto hace que me sienta como en casa, e incluso como yo no hablo mucho español, todo el mundo se esfuerza mucho en hablar mi idioma. Tengo que preparar mi primera Volvo 60, y aquí estoy encontrando todo lo que necesito.